miércoles, 15 de diciembre de 2021

El vaso vuelve a estar vacío

     Llevo la vida entera escuchando que, al contemplar un vaso que contiene un volumen de liquido equivalente a la mitad de la capacidad del volumen podría contener, los pesimistas ven el vaso “medio vacío” y los optimistas ven el vaso “medio lleno”. Yo creo que no tienen razón ninguno de los dos: El estar medio vacío (o medio lleno) es solo un estado transitorio y extremadamente efímero en la vida del vaso. ¿Sabéis cuál es la realidad más absoluta? Que, durante toda su vida útil, un vaso pasa el 98% de su tiempo vacío, esperando en una vitrina o mueble a que sirva a alguno de nuestros propósitos.

martes, 9 de noviembre de 2021

Buen camino

    Una alarma de despertador suena, débilmente, en un cuarto oscuro. Te apresuras a apagarla, antes de que moleste al resto de personas con las que compartes habitación. Intentas ponerte de pie con un esfuerzo inhumano. Te duele todo tu cuerpo y te preguntas si hoy podrás cumplir con los objetivos que en el día anterior fijaste con tus compañeros que, por cierto, ya andan desperezándose en sus respectivas camas mientras intercambian contigo sonrisas tímidas y muecas de dolor burlonas.

jueves, 4 de noviembre de 2021

Interrupciones, caos y cafeína

    Las tres constantes de mi vida: Interrupciones, caos y cafeína. Un café espera enfriándose en la esquina de un escritorio desordenado y, cuando mis dedos rozan el teclado, ya alguien me anda buscando: "¿Hiciste el informe que habíamos hablado? Lo necesito en mi mesa antes de hoy a las cuatro."

lunes, 11 de octubre de 2021

Polvo de estrellas

   Alguien dijo alguna vez que somos polvo de estrellas. Que estamos formados por multitud de elementos entrelazados, los cuales tuvieron origen en algún lugar a cientos de millones de miles de kilómetros de donde nos encontramos ahora mismo. Seguramente, en el corazón de alguna estrella que, con su muerte, nos expulsó a vagar por el infinito espacio hasta formar lo que hoy somos.

martes, 21 de septiembre de 2021

Ya no puedo hacerte el amor como antes

    Lo siento, ya no puedo hacerte el amor como antes. No tengo tiempo. Ya no. Ya no puedo rozar tus palabras y dedicarte mis noches de insomnio. Juguetear con cada punto, cada coma, cada signo… No puedo, no tengo tiempo. Acariciar tus teclas como si fuésemos inmortales, deteniéndome en cada esdrújula y buscándote el mejor sinónimo. Sincronizar mi respiración al ritmo de tu peculiar sonido. Releerte una y otra vez, encontrarte, pulirte, modificarte y disfrutarte. No puedo, no tengo tiempo…

domingo, 10 de mayo de 2020

El tesoro del Capitán Rogers


—Así que... Quieres el tesoro del capitán Rogers, ¿eh? —dijo un viejo hombre con melena y barba blanca. Posó una pequeña bolsita de cuero, anudada en uno de sus extremos, sobre la mesa—. Esto es lo que necesitas.
—¿Cómo sé que puedo fiarme de ti, Marcus? —dijo un joven y apuesto muchacho con un sombrero de tres puntas y barba perfilada. Una mueca de asco se dibujaba en su cara mientras miraba con desdén al anciano—. Ya engañaste a mi padre hace muchos años. ¿Crees que voy a caer yo también en tus embustes?

El caso Emily


—Espérame en el coche, vuelvo enseguida —dijo Andrew mientras se bajaba del automóvil y cerraba tras de sí la puerta.
—Jefe, no creo que sea buena idea…
—Robert, —Andrew se inclinó asomándose por la ventanilla para mirar a su compañero directamente a los ojos— confía en mí. Jason es un viejo conocido, pero no se fía de los extraños. Es mejor que esperes aquí.
Una lluvia torrencial golpeaba la gabardina gris y el sombrero de Andrew, quien recorrió trotando los pocos metros que separaban el coche de aquella casa solitaria a las afueras de Los Ángeles.